miércoles, julio 30, 2008

REFLEXIONES VERANIEGAS: DE LA TERNURA


De cuando necesitas mi mano, o yo la tuya, simplemente para tenerla entre los dedos.
De cuando noto que te quiero a mi lado para darnos uno de esos fugaces abrazos injustificados.
De cuando entre la gente nos miramos, y lo que veo en tus ojos hace que sienta una corriente cálida en la espalda, y deseos de besarte.
De cuando hablas suave y escucho el sonido de tu voz con el oido puesto en tu pecho desnudo.
De cuando acabas de marcharte y de pronto tu ausencia, como un agujero negro, se lo traga todo y me deja flotando en el vacío.
De como recorremos los contornos de la vida, buscándonos furiosamente, con los brazos extendidos, buscándonos, sí, con la fiebre del que busca la mitad que le falta para encontrar una razón que le haga despertar cada mañana.
De ti y de mi.
Adictos a nuestra recíproca ternura.