viernes, febrero 14, 2020

UN SAN VALENTÍN DE M...


Este San Valentin mi estado de cosas no tiene nada que ver con el espíritu pastelero del año anterior en el que creo que hice incluso una selección de mis boleros favoritos.....no,para nada. Que no es que las cosas estén todo-todo lo mal que podrían estar, pero ni de lejos están tan bien como deberían ser, es decir una puta mierd lata, vamos. Por eso mi microcelebracion valentinesca de este año se va a limitar a rescatar del pasado esta tremendona canción de mi amiga Wendy que tan bien me suena:


Y es que Wendy con su pintalabios tono rosa-chicle es mucha Wendy hasta así, puteada, desengañada y rabiosa, ¿o qué?...ainss, Wendy, que recuerdos y que tiempos aquellos en los que yo no era nada más que un zigoto sin preocupaciones (... vale, quizás con lo de "zigoto" me he columpiado un poco, jejeje..) 


Con esto me largo. 
Que por si fuera poco todo lo demás, me toca trabajar de tarde. Estoy teniendo mucha paciencia con la gracieta esta de "la mala suerte del año bisiesto" pero al final me voy a cansar y se va a liar parda, avisados quedáis todos: los Hados, el Destino y el Karma de los coj... ¡vaaaale, respira caray! Que hay que ver qué mal hablas cuando te tocan las pelotas, angelillo.