domingo, abril 15, 2007

DECALOGO DEL BUEN EXPLORADOR ( metáforas para la vida cotidiana )


Cuando en la vida, mis queridos exploradores, nos internamos por senderos desconocidos, siempre debemos tener presente el siguiente decálogo de supervivencia:

1. Antes de internarte en terreno peligroso, asegúrate de contar con amigos que te ayuden en el camino.

2. Ve preparado. Puede faltarte el alimento. Puedes tener frío... recuerda que no sabes nunca lo que te aguarda veinte pasos más allá.

3. No olvides nunca tu linterna, llévala junto a tu corazón. Las horas de noches oscuras se dan por sobreentendidas.

4. Observa las señales: el musgo de los árboles, la situación de la Estrella Polar... nunca, nunca pierdas tu rumbo.

5. Sé positivo. La marcha es larga y no todo será fácil. Acepta que en algún momento te sentarás y llorarás sintiéndote perdido. Es parte del camino.

6. Disfruta cada uno de tus pasos. A menudo es más hermoso lo que encierra cada segundo del trayecto que lo que nos depara nuestra meta.

7. Sigue tu instinto. Si te inspira, si es bello, si te hace feliz... entonces no estás perdido.

8. Se valiente. No abandones antes de empezar por miedo a los peligros del camino. Vive la ruta con todo su esplendor y con su a menudo terrible intensidad.

9. Nunca retrocedas. Nunca vuelvas atrás. Puedes ceder terreno pero no recuperarás el tiempo perdido de modo que... siempre adelante, con la mirada alta, seguro de tu empeño.

10. ...recuerda que, solo por estar ahí, ya eres un héroe.

Que la vida es esta aventura.

Que podemos sentirnos débiles, que podemos desfallecer, pero nuestro tiempo es una flor preciosa de fragancia efímera y no debemos perder un segundo de su belleza.

Que lo hermoso quede en tu interior, a salvo de las inclemencias del paso de los años.

Porque quien no sale de su refugio, quien no siente en la cara el sol de la mañana ni se estremece bajo la lluvia fría del crepúsculo, no puede decir que ha vivido.

Ahora, con estas palabras, parte, amigo, y que el mundo y la suerte te sonrían.