domingo, octubre 07, 2007

INSALATA CAPRESE


Este tierno animal de mirada cándida, peinado a raya y aspecto un poco guarrillo es una búfala, la encantadora encargada de suministrar la leche con la que luego se elaborará la mozzarella, ese popular queso italiano que se utiliza en tantos platos típicos del pais como por ejemplo, la insalata caprese.

Insalata caprese
Ingredienti per 4 persone:1/2 kg. di mozzarella di bufala (possibilmente aversana)-1/2 kg. di pomidoro cuore di bue sodi e non eccessivamente maturi-1 bicchiere d’olio d’oliva e.v.-4 o 5 filetti di acciuga sott’olio-1/2 etto di capperi dissalati -1 cipolla di tropea affettata sottilmente-1 cucchiaio di origano-2 o 3 ciuffi di basilico freschissimo-Sale e pepe q.b
Preparazione:Lavate accuratamente i pomidoro, privateli del peduncolo verde ed affettateli , inferendo un taglio verticale lungo l’asse maggiore in modo da ottenere delle sode fette spesse circa 1 cm.Ugualmente affettate la mozzarella ottenendone fette di 1 cm di spessore; sistemate in un piatto di portata le fette di pomidoro, alternandole con quelle di mozzarella, salate pepate aggiungendo la cipolla affettata sottilmente, i capperi lavati e dissalati, i filetti d’acciuga; spolverizzate sul tutto il cucchiaio di origano ed irrorate a filo con tutto l’olio; guarnite con i ciuffi di basilico e trasferite il piatto in frigo per circa 1 ora.Servite con crostini di pane bruscati al forno, accompagnando con profumati vini bianchi, possibilmente campani (Ischia – Capri) freddi di frigo.
Las búfalas, como buenos habitantes de la zona mediterránea, aman la tranquilidad, las siestas, los pastos tranquilos y revolcarse en aguas fangosas los días calurosos ( que es la idea romántica que tienen ellas del chapuzón marítimo con otros dos mil humanos en alguna playa de moda ). Probablemente las búfalas serían mucho más felices si a algún desgraciao no se le hubiese ocurrido preparar queso con su leche y descubrir que sabía buenísimo... Yo abrigo la esperanza de que para dar una buena producción láctea las búfalas precisen mantener su pausado ritmo de vida y las mantengan en ese idílico estado tan próximo a la felicidad. De esa manera no solo serán el alma mater de la mozzarella sino que además se convertirán en el espejo en el que todos nosotros debemos reflejarnos, jajaja: sí, hoy siéntete un poco búfala, márcate tu propio ritmo, no te dejes arrastrar por la corriente, ensaya esa media sonrisa que muestran las dos modelos de la fotografía que viene a decir algo así como "para cuando dices que quieres ese litro de leche, para dentro de cuanto?...haa-haa-haaa", parpadea lento, ramonea un poco de hierba fresca en algún lugar agradable, contempla el movimiento de las nubes y de los pájaros, qué se yo. Está permitido prescindir del revolcón en aguas fangosas ( pero a gusto de cada uno, ¿eh?).
Y mientras tanto, devuélvele el favor a las búfalas por toda esa mozzarella y esa filosofía de la buena vida y no abuses de la insalata caprese sin ton ni son.
Un besote.