EL PASO DEL ECUADOR (de Agosto)
Mi primera quincena del mes veraniego por excelencia me la he pasado homenajeando a dicho mes, porque he seguido sin trabajar y ahorrandome sudores laborales entre ola y ola de calor. Por ese lado, ¡inmejorable! Por el otro, a causa de la baja laboral todos mis proyectos vacacionales se han ido al garete y eso, ¡claro!, ha sido un poco "bluf". Que vale que en mi estado de cosas he aprendido a no tener prisa por nada, a no estresarme demasiado y a no esperar nada a propósito de nada ni de nadie para no sentirme defraudado. Enseñanza china del día: si no tienes expectativas es complicado que algo o alguien consiga decepcionarte. Aún así he tenido un poco de fatiga vital, y el colmo de mis males ha sido la desgracia estival del año: ¡que nos ha abandonado Olivia! ...ahora estoy pensando en un viejo conocido cuyas pasiones eran dos perrazos del tamaño de dos toros de miura y ¡Olivia!, de quién tenia TODO lo que uno se pueda imaginar: discos, cassetes, CD...