Volando a ras de suelo

Bien, vamos a ver... Otra puesta al día en plan mantenimiento, porque no tengo demasiadas ganas de escribir y cuando lo hago no me apetece hacerlo sobre mi realidad inmediata porque aquí es todo tan poco estimulante como siempre, si no más. ( De pronto me he visto siendo viejecito, con la Muerte haciéndome cosquillas en el entrecejo empleando uno de sus dedos huesudos y diciendo: " vamos, pamplinas, ya puedes dejar de quejarte, se acabó toda esta movida que tan mal has sabido gestionar." Y yo, previsiblemente, me haré pis encima y gemiré: "nononono, creo que ya sé como tengo que llevar el asunto, si me dejas un par de añitos más creo que voy a llevarlo perfecto" La Sabia Muerte chasqueará una lengua invisible y dirá "venga, de camino me lo cuentas" y ahí terminará la historia. Tengo mis serias dudas de que cuando uno está en el trance de marcharse al otro barrio tenga tiempo de pensar en teologías ni en romanticismos, más bien ...