Volando a ras de suelo

Hoy buena parte de la humanidad se arrastra a mi alrededor lamentándose por la vuelta al curro después de tantos días de tralalí y tralalá. Bueno, pues este es mi mensaje para toda esa humanidad que pasa los puentes y festivos tocándose el peluche mientras yo estoy en la mina dale que te pego:  "el que tenga que trabajar, que se ...*".  No me vengais a calentar la cabeza con vuestros gimoteos de "buaah, luneees" porque ya me la calentasteis bastante hace diez días cuando anticipabais la semana larga de tocarse la pilila que os esperaba. La única ventaja de mis horarios es que puedo contemplar como el resto de los de mi especie sufren y se convulsionan dentro de sus ritmos programados mientras yo, allá en mi risco, sigo ritmo propio ajeno a fiestas y calendarios. Y además, pues sigo eso, currando, desempolvando mis discos navideños que reservo para estas fechas entrañables -y que al parecer no gustan a nadie más que a mi- y buscando imágenes cargadas de espíritu navi...